Personalmente no tenía muchas ganas de ver esta película, lo único que me atraía en principio se basaba en poder verla en su formato en 3D. La razón: que ya tuve la "suerte" de ver el día del estreno "Beowulf" de Graham Baker (si, la de Christopher Lambert) y con esta referencia…
Aun así, y por la curiosidad del 3D, fui a verla y la verdad es que impresiona. Dirigida por Robert Zemeckis "Beowulf" vuelve a ser un tremendo trabajo visual de su creador. Según empieza la película la sensación es increíble, los primeros minutos parecen simplemente concebidos para desbordar la mente con cientos de objetos y movimientos de cámara hechos únicamente para disfrutarse en este formato. Un momento abrumador que se relaja al acabar la escena y que sirve para preparar al espectador (y a sus ojos) para lo que le queda por descubrir. Tras esto, exceptuando determinados detalles y movimientos de personajes, la sensación disminuye (incluso a veces se olvida) y empiezas a darte cuenta del único error del 3D y de las gafas: que el color se difumina en la oscuridad de los cristales, apagando la imagen.
Por otro lado diferente va la trama. Sencilla, basada en un viejo poema épico inglés datado en el siglo 11. Un poema que trata sobre la ambición de la juventud, capaz de retar a monstruos, cruzar mares o morir por alcanzar la fama, la gloria o un reinado. De hecho la película se divide en dos partes: la primera cuenta como el joven Beowulf acude en ayuda de un viejo rey cuya corona se encuentra en peligro debido a un monstruo (Grendel) que acosa sus tierras. La ambición del protagonista acabará por derrotar al monstruo y le llevará a realizar un trato con su madre para alcanzar todos sus sueños. La segunda parte comienza años después, con un Beowulf adulto y rey que se ve obligado a lidiar con un nuevo monstruo; una etapa de redención personal en la que tendrá que luchar contra los fantasmas del pasado.
Lejos de ser una gran película, será recordada como el primer largometraje de animación 3D para adultos. Los personajes están realmente bien conseguidos (sobre todo en primeros planos) y la acción hace que sea entretenida, una versión muy diferente a la de protagonizó Lambert. Un deleite visual que esperemos se repita en próximos años.
Lo peor.- Pagar dos Euros más de entrada por las gafas 3D y que luego te las quiten.
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